martes, 3 de junio de 2014

La perspectiva bíblica de la historia, desde la providencia divina /Nahum Vega

                                      Nahum Vega Maldonado

“La historia es central para la fe cristiana, porque es en la arena del tiempo y los acontecimientos humanos donde se desarrolla el plan redentor de Dios y el entendimiento de su Reino”. Pablo A. Deiros

PROLEGÓMENO:
Percibirnos a nosotros, en un lugar y un tiempo es estar conscientes de la historia y de nuestras propias historias. Sabernos así; nos permite preguntarnos, ¿por qué estoy aquí? Una respuesta concreta desde la teología podría ser: por la misericordia de Dios, por la gracia de Dios, y por la providencia de Dios. De las tres respuestas posiblemente la menos discutida y enseñada sea: la providencia de Dios.

Si definimos la providencia de Dios como: Dios obra su soberana voluntad en todos y todas las cosas y en todos los acontecimientos para cumplir su propósito. Tenemos que decir que Dios es el señor de la historia y los hombres solo hacemos nuestras propias narrativas de los acontecimientos, a esto es lo que llamamos “nuestras historias”, en la presente reflexión.

Además de que podemos distinguir la historia de todos y nuestra particular e individual historia, donde Dios esta en control cumpliendo su propósito. Para ejemplificar lo antes dicho, veamos la historia y las historias en el Antiguo testamento en relación a la providencia de Dios; luego la historia y las historias en el Nuevo testamento, y por último la historia y nuestras propias historias en la actualidad que es desde donde hacemos la hermenéutica de la Providencia de Dios.



1. La historia y las historias en el Antiguo testamento

1.1 En la narrativa de Moisés.

La primera revelación amplia del Creador al hombre se da en las historias de un hombre Moshe, su historia pasa muy rápido en los primeros 2 capítulos del Éxodo pero el capítulo 3 irrumpe en sus historias… y Dios en control de la historia.

Moisés cuidaba las ovejas de Jetro, su suegro, que era sacerdote de Madián, y un día llevó las ovejas a través del desierto y llegó hasta Horeb, el monte de Dios.  Allí, el ángel del Señor se le apareció en medio de una zarza envuelta en fuego. Moisés miró, y vio que la zarza ardía en el fuego, pero no se consumía. Entonces dijo: «Voy a ir y ver esta grande visión, por qué es que la zarza no se quema.»

El Señor vio que Moisés iba a ver la zarza, así que desde la zarza lo llamó y le dijo:
«¡Moisés, Moisés!» Y él respondió: «Aquí estoy.»El Señor le dijo: «No te acerques. Quítate el calzado de tus pies, porque el lugar donde ahora estás es tierra santa.»Y también dijo: «Yo soy el Dios de tu padre. Soy el Dios de Abrahán, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob.»
Entonces Moisés cubrió su rostro, porque tuvo miedo de mirar a Dios. 
Luego el Señor dijo:«He visto muy bien la aflicción de mi pueblo que está en Egipto. He oído su clamor por causa de sus explotadores. He sabido de sus angustias, y he descendido para librarlos de manos de los egipcios y sacarlos de esa tierra….

Posiblemente Moisés tendría muchas historias y sus narrativas tenían que ver con su realidad, soy tartamudo, posiblemente por su mente pasaron las palabras que le diría al pueblo. Ya no recordaba su propio idioma, eran muchos años sin contacto con su gente y las palabras no saldrían. Es posible que sus amigos y personas que le conocían ya no estuvieran.

La respuesta de Dios es: en mi providencia yo me hago responsable de la historia:ya en el capítulo 4. 11 ¿Y quién le dio la boca al hombre? ¿O quién hizo al mudo y al sordo, o al que ve y al que no ve? ¿Acaso no soy yo el Señor? 

Ahora vemos que Dios irrumpe en la narrativa de los hombres con su historia de poder y prodigios. y el se hace responsable de esta historia.


1.2 En la narrativa de José.

Otro ejemplo magnifico de las historias, es la de un hombre: Yoshe Benyacob, vemos la intervención divina para hacer de las cosas difíciles de una vida, la Historia de Dios. Retrocedamos unas cuantas hojas en la Biblia para saber de estas historias.

Génesis 37.2
Ésta es una de las historias de la familia de Jacob: José tenía diecisiete años de edad, y apacentaba las ovejas con sus hermanos. 

La humanidad es narradora de sus historias, desde siempre y en todas las culturas está presente la narración como forma de contarnos a nosotros mismos como somos y de donde venimos. La narración de la vida de José es extraordinaria no importando lo que le ha pasado; ser vendido por sus propios hermanos, calumniado por la esposa de su jefe, olvidado por su familia y amigos. Él puede re escribir su vida y la nueva narrativa es dentro de lo que Dios quiere; dentro de la Historia de Dios.

2. La historia y las historias en el Nuevo testamento

2.1 Jesucristo el Señor de la historia.

El tiempo donde la voz profética de Dios no estuvo presente entre su pueblo debió ser un tiempo donde muchas historias tuvieron lugar, donde se trato de aprender de la historia y se reflexionó sobre el apego a la ley de Dios. El Nuevo Testamento tiene sus raíces muy profundas en la Historia que Dios  dio a conocer en el pasado y la nueva Historia que iniciaría a contar.

A Pablo de toca expresarlo en una sola oración a través de la revelación divina:
Gálatas 4.4 y 5
Pero cuando se cumplió el tiempo señalado, Dios envió a su Hijo, que nació de una mujer y sujeto a la ley, para que redimiera a los que estaban sujetos a la ley, a fin de que recibiéramos la adopción de hijos.

La historia de Dios en cuanto a la Ley tenía un propósito y era mostrarnos cuan esclavos y dependientes somos del pecado y que la nueva Historia de Dios se llama volvernos a comprar.  Es pues la Redención la Historia sobre la cual vivimos de aquí en adelante nuestras propias y me parece muy particulares narrativas están escritas dentro del propósito del Señor.

2.2 En la narrativa de Pablo

Sin lugar a duda una de las narrativas más interesantes del nuevo testamento es la de Pablo el apóstol a los gentiles, su formación es en el pensamiento mas estricto en cuanto al cumplimiento a los mandamientos. 
Así se los dice a los filipenses en el capitulo 3. 4 al 6
Aunque también yo tengo de qué confiar en la carne. Si alguno piensa que tiene de qué confiar en la carne, yo más:  fui circuncidado al octavo día, y soy del linaje de Israel, de la tribu de Benjamín; soy hebreo de hebreos y, en cuanto a la ley, fariseo;  en cuanto a celo, perseguidor de la iglesia; en cuanto a la justicia que se basa en la ley, irreprensible.

Estas eran sus propias historias, su narrativa de la vida
pero por la gracia cambió está confianza de tratar de conocer a ser conocido en la Historia de Dios.

3. La historia y las historias en nuestras propias vidas.

3.1. Nuestras propias historias frente  las historias de Dios

El historiador y sociólogo Jean Pierre Bastian autor de varios libros sobre la historia del protestantismo en México, entre ellos cabe destacar el publicado por el Fondo de Cultura Económica. LOS DISIDENTES. Sociedades protestantes y revolución en México, 1872-1911.

Bastian en alguna conferencia dijo que El cristianismo nació en un sistema de producción esclavista, paso al sistema de producción feudal, se desarrollo en el sistema de producción capitalista y ha sabido sobre vivir al sistema de producción socialista.

Porque la Historia de Dios está más allá de las historias de los hombres. Y aún cuando un nuevo sistema de producción llegara. Dios y su historia estará cumpliendo su propósito.

A finales del siglo pasado después de muchos años de que en el Estado mexicano de Jalisco viviera bajo un solo partido político que simple ganaba las elecciones para gobernador, y debido a una catástrofe por un mal cuidado en el drenaje de la ciudad y la filtración de combustible, había la posibilidad que un partido de otro color llegara a gobernar. Para algunos cristianos y así me lo dijeron en su momento fue de gran temor ya que ese partido se le asociaba a la jerarquía Católica.
A mi me parecía que ese temor era principalmente por la falta de comprensión de lo que es nuestras historias y que es la historia de Dios. La providencia divina. Saber que pase lo que pase él en su soberana voluntad cumplirá su propósito.

COLOFÓN:
Mis historias personales, el porqué mis padres migraron a la ciudad capital del país a mediados del siglo pasado, el porqué se conocieron en la iglesia donde asistían, el cómo ese pastor se intereso por darnos teología a un grupo de adolescentes y trajo un amigo de la iglesia reformada y abrió un hambre por lo teológico, luego como a la iglesia donde mis papás regresan en provincia y yo con ellos y mi familia recién formada me incorporo en un seminario a distancia para estudiar y al terminar mis estudios, el porqué conozco a un misionero que me abre el panorama de hacer hermenéutica desde mi propio contexto….
pongo sólo las hebras dejo de lado los muchos nudos en mi vida. 


En fin, es como ver las hebras en el botado de la abuela que solo vemos la parte de abajo, Pero Dios tiene mis historias y tus historias por la parte donde sabe que todo va a un propósito, y debemos estar muy agradecidos por sabernos dentro del plan de Dios y estar en la providencia de Dios y aun cuando…..   

              “ahora vemos con opacidad, como a través de un espejo, pero en aquel día veremos cara a cara; ahora conozco en parte, pero en aquel día conoceré tal y como soy conocido”. 

1 Corintios 13.12