jueves, 23 de marzo de 2017

Notas breves del libro: ¿Para qué sirve la teología? de Alberto F. Roldan / por Nahum Vega

Notas breves del libro: ¿Para qué sirve la teología? de Alberto F. Roldan / LIBROS DESAFÍO

“La teología es la criatura hablando de su creador”
Steve Shallert

Un libro que inicia con una presentación, un  prólogo del autor a la segunda edición. un prólogo más por  José Míguez Bonino y  prefacio; se le debía mirar con cierto cuidado. Pero pronto se descubre que será un libro que abrevado en años de experiencia en el esfuerzo de la FTL (Fraternidad Teológica Latinoamericana).

La fraternidad desde siempre y a través de sus múltiples participantes a puesto en práctica el que hacer teológico desde nuestra America. Como se dicho tradicionalmente la Exégesis se hacia desde el norte y la hermenéutica le tocaba al sur. Pero, este libro es una muestra de que se puede hacer teología desde Latinoamérica. 

En segundo lugar deja bien en claro la erudición de Alberto Roldán y las muchas fuentes a su alcance para un análisis que responde muy bien al interrogante que da título a su libro. Las referencias y bibliografía finales como nos hace notar uno de los comentaristas del libro son influencia  de muchas corrientes y aporta más a lo valioso que será este documento. 


Notas del Capitulo 1: ¿Qué es la teología”

Roldán de inicio nos invita a “encaremos la tarea con la mayor seriedad y precisión”. De entrada estamos ante un tema de estudio de gran importancia, muchas veces hago este comentario no se si lo leí lo escuche o lo deduje: “es verdad qué no todos los teólogos son cristianos, pero el problema no es ese sino que todo los cristianos hacemos teología” y que mejor hacerla como dice este autor, con seriedad y precisión.

Leer la definición de Teología de Kevan,  Hodge, Tillich y finalizarla con  Karl Barth. Es toda una experiencia y sobre todo la distinción de los perfiles que hace. Por un lado la teología como ciencia y la teología como revelación de Dios mismo. Desde mi punto de vista lo sistemático es un agregado a la teología que fue necesario para explicar la cosmogonía cristiana después de la ilustración y el enciclopedismo.  Aquí Roldán hace una mención sobre este tema de lo sistemático a Luis Berkhof. Me parece que es bueno citarlo ya que siempre será un referente y como tal muy citado poco leído. El “ladrillito”  “Teología Sistemática”, creo vale la pena por lo menos de este libro el capítulo dos y su sugerente tema: “Nuestro conocimiento de Dios es incomprensible pero conocible”

La critica a la sistemática que pone todo en cajones y escalones; Dios, hombre, pecado, salvación, eclesiología y al final escatología es muy interesante y además esa muy buena cita de Küng,  “El problema de Dios es también el problema del hombre” y reflexionado por el autor al revés, clarifica su critica a la sistemática.

Usando palabras actuales el autor me parece nos propone una revisión de la teología  desde la trasversalidad donde el inicio y final no son necesariamente un orden correcto, sino una correlación. Así que las cosas finales “escatología” puede ser el motor de la fe y la teología que se construye en el día a día. Imposible para mi dejar de citar el fin principal del hombre en la doctrina protestante: glorificar a Dios y gozar de él para siempre.

El siguiente párrafo que transcribo, resume desde mi punto de vista el pensamiento de Roldán de qué es la teología:
“¿Se puede elaborar un discurso sobre Dios? 
En un sentido estricto, es muy cierto aquello que dijera Karl Barth: «de Dios puede hablar sólo Dios». De modo que, en términos absolutos,  hay sólo una teología infalible, perfecta, es decir, la teología de Dios, su Palabra. Pero, con todo, es posible elaborar un discurso actual sobre Dios, si tenemos en cuenta los siguientes hechos:
El que se acerca a Dios debe creer que le hay  (Heb. 11:6). Este Dios vivo y verdadero, eterno, ha actuado en el tiempo de los hombres. Es el Creador de todas las cosas, el Soberano. Pero a pesar de su grandeza, no ha dejado al hombre, su criatura, en el abandono o la ignorancia.
Por el contrario, se ha revelado tanto en forma general como especial. Se ha revelado en su creación y en su Palabra: encarnada y escrita. «Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras a nuestros
padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo» (Heb. 1:1-2). Son las Escrituras las que contienen el registro de este hablar de Dios. Su centro es la Persona de Jesucristo, el Verbo, la Palabra, el Logos de Dios (Jn. 1:1, 14). Las Escrituras constituyen el texto de la teología, porque el tema de esta ciencia no es Dios en absoluto sino Dios en su revelación. El conocimiento que logramos adquirir de Dios, no será exhaustivo —¡no podemos agotar a Dios!— pero sí verdadero, porque está fundamentado en su revelación.”

El autor nos muestra que un acercamiento teológico sin la Biblia no tiene un buen cimiento. y que “el requisito para todo conocimiento teológico auténtico, es la disposición a realizar la voluntad de Dios.” 

Y la teología para Roldán es claro que es una ciencia, como el dice, limitada como cualquier ciencia que se hace desde nuestra  humanidad. Se relaciona con la ciencias sociales y humanas, como la lingüística, la epistemología. Las limitaciones que le pone el pensamiento de Kant,  no le impiden ser una ciencia de la fe. (lumen fideí). luz de la fe que el pensamiento Tomas de Aquino nos  clarifico que no es desde la razón sino desde la fe.

Aquí el autor cita una ves más a Hans Küng. y Karl Barth, Creo que son dos teólogos que tenemos que releer mucho en nuestro que hacer teológico. Para caminar sobe el quehacer teológico en America Latina y Que bueno que hay este libro tan erudito como: ¿Para qué sirve la teología? de Alberto F. Roldan  que nos abre el apetito en estos temas.


Nahum Vega